Alberto restituyó una placa recordatoria del hijo de Taty Almeida

El presidente Alberto Fernández participó junto a la titular de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, Taty Almeida, del acto de restitución de la placa en memoria de su hijo, Alejandro Almeida, desaparecido en junio de 1975, que había sido vandalizada por un empleado en el Instituto Geográfico Nacional dependiente del Ministerio de Defensa.

En un fuerte gesto de apoyo a la lucha de los organismos defensores de los derechos humanos y en repudio al accionar durante la última dictadura militar, Fernández respondió de esta manera al apoyo que recibió esta semana de las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo que lo visitaron en la Casa Rosada.

Durante el breve acto este viernes realizado en la sede del IGN ubicado en Cabildo 381 de esta capital, Fernández estuvo acompañado por el ministro de Defensa, Agustín Rossi; el secretario de Derechos Humanos de la Nación, Horacio Pietragalla Corti; y Taty Almeida, integrante de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora.

Alejandro trabajó en el área de cartografía del IGN unos meses antes de ser secuestrado cuando tenía 20 años en 1975 por la Triple A.

Había trabajado como cadete en la Agencia Télam, militaba en el Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP) y cursaba el primer año de la carrera de Medicina.

«Ese día no fue a trabajar porque al día siguiente tenía que rendir un parcial. Vivía conmigo. Antes de salir me dijo ‘esperá que ya vengo’. Fue lo último que escuché de Alejandro«, recordó Taty.

La placa que lo recuerda fue colocada el 22 de marzo de 2013. La restitución de la misma se realizó luego de que fuera dañada y arrancada esta semana por un empleado del Instituto Geográfico, hijo de un militar que reconoció su accionar y será sancionado.

«Siento mucha pena e indignación. Porque no están sólo faltándole el respeto a Alejandro, si no que es un ataque contra los 30 mil desaparecidos«, dijo Taty Almeida.

El director del Instituto, Sergio Cimbaro, se enteró de la ausencia de la placa, el organismo realizó una denuncia judicial e hizo girar un comunicado interno repudiando el acto de vandalización. Según comentaron fuentes del Ministerio de Defensa, un trabajador del instituto se presentó en la oficina de Cimbaro y confesó, arrepentido, que él se había llevado placa.

Según indicaron desde el ministerio de Defensa, el empleado que robó la placa recibirá una sanción ejemplificadora, pero no será expulsado.