«El índice de pobreza no es del 32 % sino del 35,9 %»

El economista aseguró que la situación es más grave que la difundida por el Indec, ya que en el último trimestre de 2018 se registraron más de 16 millones de pobres. Planteó la necesidad de construir un gran frente electoral para derrotar a Macri

Claudio Lozano aseguró que el actual índice de pobreza es mucho más alarmante que el anunciado el jueves por el Indec. «No es del 32 % sino del 35, 9 %. Eso significa que hay más de 16 millones de personas pobres en la Argentina«, detalló.

El economista explicó que la diferencia con los datos difundidos por el organismo de estadística y censos surge del período contemplado. «El informe oficial dio a conocer la pobreza del último semestre de 2018 y yo estoy hablando específicamente del último trimestre del año pasado, donde creció notablemente«.

La variación se hace aún más ostensible al comparar el primer trimestre con el último de 2018, lapso en el que la tasa de pobreza trepó más de diez puntos (pasó del 25, 5 % al 35.9 %). Dicho en otras palabras, el año pasado comenzó con 11.309.617 de pobres y terminó con 16.066.601 de personas en esa condición.

El presidente de Unidad Popular plasmó una radiografía del «derrumbe social» en un documento elaborado por el Instituto de Pensamiento y Políticas Públicas, que el periodista Marcelo Zlotogwiazda adelantó ayer en Infobae. El trabajo se hizo en base a los datos del Indec.

El deterioro social coincide con una compleja coyuntura económica, con políticas de ajuste, austeridad fiscal, desregulación financiera, inflación y corrida cambiaria. «No va a ser fácil contener al dólar y eso va a significar nuevos incrementos de precios», aseguró Lozano.

—El gobierno deposita sus esperanzas en el FMI y en el campo.

—¡Ojo que el FMI le autorizó al gobierno la utilización de 9600 millones de dólares para cancelar vencimientos en pesos! Y respecto al campo hay que prestar atención porque no quiere liquidar divisas en el piso de la banda cambiaria, lo quiere hacer con un dólar más alto. Y, como si fuera poco, en mayo los que especularon con el peso vuelven al dólar. No la tiene fácil el gobierno.