Escrache a Alberto Fernández por los incendios en la Patagonia

El Presidente de la Nación visitó este sábado las zonas afectadas por el fuego, pero un grupo de vecinos atacó a piedrazos la combi en la que viajaba.

Momentos de extrema tensión se vivieron este sábado en la localidad de Lago Puelo, en la provincia de Chubut, en el marco de la visita que realizó el presidente Alberto Fernández a las zonas afectadas por los incendios forestales que comenzaron hace tres días y no solo causaron una tragedia ambiental sino que también provocaron gravísimos daños materiales.

A tres días de iniciado el fuego que dejó a decenas de personas en la calle debido a la quema de sus hogares, el mandatario se dirigió a las zonas afectadas para interiorizarse de la situación y anunciar una serie de medidas de ayuda tanto para el Gobierno provincial como para las personas afectadas por la tragedia. Sin embargo, no fue recibido de la mejor manera y un grupo de manifestantes organizó un escrache que terminó por convertirse en un violento ataque a golpes de puño, patadas y hasta piedrazos contra la combi en la que se movilizaba junto a una comitiva de funcionarios locales y nacionales.

Los incidentes comenzaron apenas llegó el helicóptero que trasladaba a la comitiva a la zona. Decenas de manifestantes recibieron a gritos el paso de las camionetas que trasladaban a los funcionarios.

No obstante, el punto más álgido se registró luego de que Fernández se reuniera con funcionarios locales para analizar los alcances del desastre. Varios testigos del hecho grabaron desde diferentes ángulos el ataque que sufrió el vehículo en el que circulaba el Presidentes.

La combi de Parques Nacionales en la que se trasladaba el mandatario quedó severamente dañada y apenas pudo dejar la zona ante los manifestantes que no paraban de cruzarse en el camino del vehículo para obligar a detenerlo y hacer oír su voz.

Poco después del hecho también trascendieron las impactantes imágenes que dan cuenta del estado en el que quedó la camioneta, que no solo sufrió serios abollones sino también la explosión de al menos dos ventanas