“Hay que bajar dos cambios”

Crece el malestar de la UCR hacia Patricia Bullrich por su participación en los cacerolazos

Uno de los primeros referentes radicales en cuestionarla había sido Gerardo Morales, gobernador de Jujuy.

Desde el anuncio de las nuevas restricciones para combatir la segunda ola de coronavirus en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), se llevaron a cabo distintas manifestaciones contra las medidas dispuestas por el presidente Alberto Fernández frente a la Quinta de Olivos. Patricia Bullrich estuvo presente en varias jornadas, y esto generó cierto malestar por parte de referentes de la Unión Cívica Radical (UCR), quienes criticaron a la titular del PRO por tener “posiciones acusatorias” en lugar de “reclamantes”.

Uno de los primeros en cuestionar a Bullrich fue el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, y en la jornada de hoy se sumó el diputado nacional Facundo Suárez Lastra. En declaraciones a Lado P (Radio Rivadavia), manifestó su alejamiento de las “posiciones políticas en el extremo” que adoptó últimamente la titular del partido amarillo, según publicó la agencia Noticias Argentinas.

El diputado radical diferenció a los gobernantes de la oposición, que han tenido actitudes “serias y colaborativas”, de Bullrich, a quien le atribuye “posiciones más acusatorias que reclamantes de cambios”. “Los gobernantes de la oposición han estado absolutamente a la altura de las circunstancias con actitudes serias y colaborativas”, afirmó, en referencia a Horacio Rodríguez Larreta (PRO), Gustavo Valdés (Corrientes), Rodolfo Suárez (Mendoza) y el ya mencionado Morales (Jujuy).

Cabe recordar que este último ya había destapado la olla del descontento con Bullrich, a quien cruzó por “deslegitimar un reclamo de los papás de la comunidad educativa con un cacerolazo en la casa del presidente (Alberto Fernández). Es como que legitimamos que en la casa del jefe de Estado haya que hacer un escrache”, se quejó el radical jujeño.

En la misma sintonía, Suárez Lastra dijo que le “pareció muy mal” la participación de Bullrich en el cacerolazo de la semana pasada “porque cuando uno está reclamando diálogo no va a gritarle en la puerta de a quien se lo reclama”. “Hay un perfil que requiere moderación. Esta crisis requiere moderación del Gobierno y de la oposición”, consideró el porteño.

La crítica de Suárez Lastra no quedó ahí sino que acusó a Bullrich se haber empezado a hacer campaña electoral cuando la emergencia sanitaria exige “moderar las vocaciones competitivas” “Hay que bajar dos cambios y entender que de esta salimos trabajando todos juntos”, concluyó.

El malestar con Bullrich no solamente está presente en la UCR, sino que las apariciones disruptivas de la exministra de Seguridad de Cambiemos, perteneciente al ala dura del macrismo, inquietan al entorno de Rodríguez Larreta. De hecho, la mandamás del PRO le disputa al jefe de Gobierno porteño el liderazgo en la Ciudad y aspira a encabezar la lista de diputados nacionales.

Rodríguez Larreta no quiere saber nada con una intrusión de Bullrich en su territorio y ya tantea a María Eugenia Vidal para que regrese a la Capital Federal y dispute las PASO de Juntos por el Cambio en competencia directa con la presidenta del PRO.

La exfuncionaria ya está en modo campaña y luego de recorrer el barrio de La Boca publicó un mensaje con veladas críticas a la gestión larrestista. “La Boca está vacía. Gastronómicos, comerciantes y artistas necesitan urgente un plan: créditos blandos, quita de impuestos y aprovechamiento del espacio público. Hay que asegurarles una oportunidad en esta crisis. No podemos dejar morir a un ícono de nuestra ciudad”, twitteó Bullrich.