Kicillof apuntó también a la “mesa judicial” del macrismo

El gobernador bonaerense aseguró que en la provincia de Buenos Aires «también hubo hechos de espionajes que están saliendo a la luz» y repudió el armado de causas para «desprestigiar, perseguir y humillar» a opositores políticos.

El gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, aseguró que “esperaba que nunca después de la dictadura militar se repitieran cosas ni siquiera semejantes” al referirse al espionaje ilegal de la AFI macrista de la que también fue víctima su vicegobernadora, Verónica Magario.

En la justicia bonaerense se tramita también una causa que investiga el espionaje ilegal a funcionarios políticos, jueces y policías durante el gobierno de María Eugenia Vidal por parte del ex titular de Asuntos Internos del ministerio de Seguridad bonaerense, Guillermo Berra.

Además, en las últimas semanas el fiscal general de Lomas de Zamora, Enrique Ferrari, presentó una denuncia contra el Procurador General de la provincia de Buenos Aires, Julio Conte Grand, bajo la acusación de presunto armado de causas contra dirigentes políticos y gremiales a través de una UFI de Delitos Complejos.

Contra la mesa judicial

«Espero que toda esta gente que está siendo acusada tenga posibilidad de defenderse, que se le respeten sus garantías y sus derechos, no como hicieron durante los cuatro años pasados porque uno no quiere repetir lo que tanto sufrió», indicó sobre la causa que tramita en el juzgado de Lomas de Zamora, del juez Federico Villena, quien hoy ordenó 22 detenciones.

Kicillof consideró en declaraciones a C5N que “políticamente es muy claro uno oye hablar de una mesa judicial donde estaba aparentemente involucrado el propio Presidente, sus ministros, importantes figuras gubernamentales y no gubernamentales asociadas a una fuerza política”.

“Cuando el Presidente Alberto Fernández decía que los sótanos de la democracia habían estado muy activos durante la gestión anterior sabíamos ya unas cosas pero no, no esperábamos este grado de intensidad y voracidad en términos de estar persiguiendo opositores», concluyó, al anunciar el nuevo arribo de un cargamento desde China para luchar contra el Covid-19.

«Habrá que deslindar responsabilidades judiciales para desarticular el sistema, dejarlo expuesto y que la sociedad se pronuncie», afirmó Kicillof.

Villena ordenó detener ayer a la ex secretaria de Documentación Presidencial durante el gobierno de Mauricio Macri, Susana Martinengo; al exjefe de Contrainteligencia de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), Diego Dalmau Pereyra, y a otros 20 acusados en la investigación por supuesto espionaje ilegal a funcionarios, políticos y empresarios.

También ordenó apresar a Martín Terra, otro ex agente de la AFI y ex pareja de Analía Maiorana, la actual esposa del vicejefe de Gobierno porteño Diego Santilli, según informaron fuentes judiciales.

En la resolución en la que ordenó las detenciones, Villena advirtió que «la magnitud de la estructura ilícita reseñada, cuya inserción abarcaría distintos ámbitos del Estado Nacional, Provincial y Local, permite presumir que quienes habrían participado en los hechos materia de investigación cuentan con los medios y/o vínculos para eludir la aplicación de la ley penal»