La Plata está entre las ciudades que no modifican la cuarentena

La extensión del aislamiento social, preventivo y obligatorio por el coronavirus seguirá hasta el 10 de mayo, en las ciudades con más de 500 mil habitantes «seguirá como hasta ahora» y en aquellas con menos población, los gobernadores podrán decidir excepciones.

Al precisar los alcances de la nueva etapa de la cuarentena, el mandatario explicó que «los grandes aglomerados urbanos son los lugares de mayor riesgo de transmisión del virus», por lo cual, en aquellos con «más de 500 mil habitantes en el país seguirán cumpliendo las medidas de aislamiento social, preventivo y obligatorio como lo hicieron durante los últimos quince días, sin utilizar transporte público y cumpliendo con las recomendaciones de distanciamiento e higiene».

Entre esos aglomerados se encuentran la ciudad Autónoma de Buenos Aires, el Gran Buenos Aires, Gran La Plata, Mar del Plata, Gran Córdoba, Gran Mendoza, Salta, Gran San Juan, Gran Rosario Gran Santa Fe y Gran Tucumán–Tafí del Valle.

En tanto, en las ciudades y localidades con menos de 500 mil habitantes, a partir del lunes las autoridades provinciales podrán disponer por sí mismas excepciones, siempre y cuando se den de manera simultánea cinco requisitos, entre ellos que el tiempo de duplicación de casos confirmados no sea inferior a quince días.

A partir de entonces, deberán mantener de manera «permanente» informado al Ejecutivo Nacional, y en caso de que se produzca un aumento de los casos o que pierdan vigencia algunos de esas cinco condiciones previas, el Gobierno nacional podrá «exigir que se vuelva al período previo de la cuarentena administrada», dijo el mandatario.

Al dar cuenta de las nuevas medidas, Fernández afirmó que, a partir del lunes, el aislamiento social ingresará «en una tercera etapa» desde su inicio el pasado 20 de marzo, y anticipó que están previstas dos fases más, denominadas «reapertura progresiva» y una «nueva normalidad» hasta la liberación total de actividades.

En ese marco, el Presidente reconoció que la pandemia de coronavirus genera «conflictos económicos», y aseguró ser «consciente» de que «los argentinos necesitan volver a su vida cotidiana sin aumentar los riesgos más de lo debido».

«Cuando comenzamos estas medidas, el contagio se multiplicaba cada 3.3 días; el 12 de abril, los casos aumentaban cada 10,3 días y hoy crecen cada 17 días. Nos propusimos hacer que el contagio sea más lento y lo estamos logrando», destacó el mandatario.

Tras desplegar un mapa de Argentina, afirmó que «el mayor esfuerzo con tal de evitar el contagio debe darse en los grandes centros urbanos de la Ciudad de Buenos Aires, Capital Federal, Córdoba, las grandes ciudades de Santa Fe, y en provincias como Tierra del Fuego, Chaco y Río Negro».

En tanto, el mandatario remarcó que la Administración Pública Nacional seguirá funcionando con las dotaciones mínimas establecidas, y que seguirán suspendidas las clases, en todos los niveles, así como los eventos públicos y privados.

También seguirán cerrados los centros comerciales, cines, teatros, centros culturales, bibliotecas, museos, restaurantes, bares, gimnasios, clubes, y clausuradas las actividades turísticas.

Por último, Fernández señaló: «Sigamos cuidando a la salud que es cuidar a la Argentina. Tenemos que salir de esta situación con el menor dolor posible para que volvamos al trabajo lo más rápido posible» y le agradeció especialmente a los chicos que «se quedaron en sus casa para no contagiarse, cuidando a los adultos mayores»