Lo que no sabíamos del asilo, una crónica de Fernando Vivas

La gran sorpresa ocurrió el domingo 18 cuando el embajador uruguayo, Carlos Barros, llamó, en tono de protocolar y a la vez compungida gravedad al vicecanciller Hugo de Zela para decirle que tenían un huésped de peso. En realidad, buscó primero al canciller Néstor Popolizio, pero no lo encontró porque estaba en la cumbre de APEC en Papúa Nueva Guinea.

De Zela pisó el acelerador, avisó a Popolizio y buscó personalmente al presidente Vizcarra. Había que enterar a la población, cosa que se hizo sin más dilación, y diseñar los primeros pasos de una estrategia para que Uruguay revirtiera lo que olía a decisión tomada. Porque, ojo, el embajador Barros –me lo confirman fuentes diplomáticas– fue claro al transmitir a De Zela que su cancillería lo instruyó, el sábado en la noche, para dejar entrar a García porque lo iban a asilar. Se deduce que el aprista había entablado, por sí mismo o a través de emisarios, un auspicioso contacto con el presidente Tabaré Vázquez.

Una fuente del gobierno me contó que una de las razones fundamentales de la llamada que ese mismo día hizo el presidente Vizcarra a Vázquez fue decirle que, de acuerdo con la convención de Caracas, si bien el país asilante tiene libertad para evaluar y decidir lo que quiera, el país del asilado tiene, al menos, la prerrogativa de alcanzarle información antes de que el otro decida. Vizcarra precisó a Vázquez que, dado lo sorpresivo del caso, la documentación no se la podía entregar de inmediato sino en un par de días, el martes 20. Vázquez asintió, como quedó claro en los comunicados de su cancillería. De esta forma, la diplomacia peruana le dio relatividad a lo que parecía un asilo consumado. El canciller Rodolfo Nin, que en sus primeras declaraciones a la prensa uruguaya parecía alineado con la prematura posición pro asilo, introdujo el matiz provisional.

También se ganó tiempo, por lo menos dos días, para que voces dentro de Uruguay dieran su parecer crítico y el asilo se convirtiera en debate obligado con las distintas tendencias dentro de la coalición del Frente Amplio. Es más, me dicen que, dada la trascendencia del tema, es probable que Vázquez espere un Consejo de Ministros para tomar la decisión, pues en esa instancia está representada la coalición del Frente Amplio.

Fernando Vivas