Menos gente en la calles de la Capital Federal

El primer día de la cuarentena total y obligatoria se cumplió satisfactoriamente en la ciudad de Buenos Aires. Sin embargo, el operativo presentó deficiencias en el conurbano bonaerense, donde la gente se volcó masivamente a supermercados y otros comercios, violando todas las medidas de aislamiento dispuestas por el gobierno nacional.

Los distritos en los cuales se registraron la mayores dificultades para cumplir con la cuarentena fueron, entre otros, Moreno, Hurlingham, Jose C. Paz y San Martín.

Un funcionario que interviene en los operativos de control de calles admitió ante A24.com que en el gran Buenos Aires hubo mucha gente caminando y calificó la situación como “un desastre total”. Asimismo, esta fuente explicó que las fuerzas públicas resultaron desbordadas.

Frente a esta situación, se espera que las autoridades nacionales y provinciales profundicen en las próximas horas las medidas de bloqueo.

En este marco, el jefe de gabinete bonaerense, Carlos Bianco, y el ministro de Seguridad provincial, Sergio Berni, brindaron una conferencia de prensa y advirtieron que el pico de la epidemia en la Argentina se registrará recién hacia fines de abril y principios de mayo.

De este modo, cabe esperar una situación de alta complejidad, que requerirá de una mayor predisposición de la ciudadanía a cumplir con el aislamiento social y mayor presión de las fuerzas de seguridad en la vía pública.

30.000 argentinos esperan ser repatriados

Mientras tanto, es dramática la situación de los argentinos que se encuentran en el exterior, a la espera de una repatriación. La Cancillería nacional estima que hay hasta 30.000 personas en esa condición.

La situación más compleja se registra en España, donde 7.000 personas aguardan poder embarcar en un avión de regreso a Ezeiza. Por ahora, la situación no parece inmediata para ellos. Aerolíneas Argentina anunció un vuelo especial recién para el día 26. Para colmo, en algunos días comenzará a regir el cierre de hoteles en Madrid y otras plazas.

Un panorama similar se presenta en algunas ciudades de Estados Unidos, especialmente Miami y Nueva York, y en Italia, Brasil y Perú, entre otros sitios.

Uno de los escenarios más frágiles es el que tiene lugar en Lima, donde hay 1.000 argentinos varados y las autoridades declararon un virtual estado de sitio, con toque de queda y el ejército en las calles. El gobierno peruano no autoriza los vuelos regulares y hasta ahora se programaron dos vuelos militares, con escasa capacidad para transportar pasajeros.