«No pienso renunciar»

Son las dos de la tarde y en el centro de Santiago empieza a sentirse que regresa la intranquilidad. Bocinazos, silbatos y cánticos se escuchan desde el palacio de La Moneda.

Cientos de personas ya marchan por fuera de la sede presidencial.

Las protestas no le han dado tregua al gobierno de Sebastián Piñera desde que ordenara el alza en la tarifa del metro el 18 de octubre pasado, día en que estalló la crisis política y social más profunda de los últimos 30 años en el país sudamericano.

El gobierno suspendió la subida del precio del transporte público e incluso se comprometió a impulsar una agenda social con medidas largamente esperadas por muchos chilenos, como el aumento del 20% de las pensiones. Pero nada parece calmar la furia de la calle.

En entrevista con la BBC, la primera desde que estalló la crisis, Piñera defiende su decisión de decretar el estado de emergencia (y con ello, haber sacado a los militares a la calle), habla de las grietas del sistema político y económico chileno y asegura que, a pesar de los llamados para que renuncie, no piensa hacerlo.