«Voy a meter en cana a los que están especulando, aunque me cueste la elección»

El ministro de Economía y candidato a presidente de Unión por la Patria (UxP), Sergio Massa, pidió prisión para «los que especulan con el ahorro de la gente» en el marco de la corrida cambiaria.

Las declaraciones del titular del Palacio de Hacienda se dieron en una reunión en la Cámara Argentina de Comercio (CAC), luego de que el dólar paralelo superara la barrera de los mil pesos.

Las declaraciones de Massa

Massa expresó su malestar con las especulaciones de mercado y los operadores financieros por el aumento de la divisa norteamericana. «Voy a meter en cana a los que están especulando contra el ahorro de la gente, aunque me cueste la elección», expresó.

Además, el titular de Economía agregó: «Desde la política hay que ponerles el límite a los irresponsables y con el poder del Estado hay que ponerle el límite a los delincuentes que juegan por el patrimonio y el ahorro de la gente». 

«Puedo ganar o perder una elección, pero tengan la plena seguridad de que de acá al 10 de diciembre me voy a ocupar de ver esos 4 ó 5 pícaros en cana. Y se los digo para que después no empecemos porque se atacan al mercado, las libertades, hasta que no los vea presos, no paro», afirmó.

Contra la corrida cambiaria

Por otro lado, Sergio Massa respaldó la utilización de las leyes contra quienes especulan respecto al valor de la divisa norteamericana.

«Tengo claro quiénes son esos cuatro o cinco vivos que juegan al arbitraje. La vez pasada se me escapó un jefe a Uruguay, pero que vaya en cana. Alguna vez en Argentina el que especula con los ahorros de la gente con arbitrajes que generan ganancias ilegales extraordinarias, tiene que ir preso», indicó.

Asimismo, Massa enfatizó: «Creo que alguna vez en la Argentina el que especula con el ahorro de la gente y el que sobre los arbitrajes genera ganancias ilegales extraordinarias, tiene que ir preso. La Argentina necesita algunos presos sobre la base de la especulación del ahorro de la gente y del patrimonio de las empresas y creo que es tiempo de ponerle el límite».