Reclamos masivos contra Falabella por demoras en entregas: «Me robaron»

Usuarios denuncian que la cadena de retail no les contesta los teléfonos, por lo que no tienen noticias de sus pedidos, algunos ya cobrados en su totalidad y que todavía no han llegado a sus manos luego de esperar más de 40 días. Furiosos, crearon una petición en Change.org para juntar firmas contra el accionar de la marca, y han inundado las redes sociales de la empresa esperando por una respuesta que demora en llegar, tanto como sus compras

Debido a la cuarentena dictada por la pandemia de Coronavirus, las ventas online se han disparado en lo que respecta a la compra de productos no esenciales. Además, esta modalidad permite a las empresas poder seguir ofreciendo sus bienes a pesar de que sus locales estén cerrados. 

Tanto grandes cadenas como PyMEs han podido subsistir gracias al comercio en línea, pero los compradores no están del todo conformes con los servicios provistos, debido a que sus compras tardan demasiado tiempo en llegar hasta sus manos. 

Este fenómeno sucede, sobre todo, con las grandes cadenas de electrodomésticos, indumentaria, entre otros rubros, que dependen de sistemas de correos que están saturados con la demanda. En cambio, las pequeñas y medianas empresas han podido subsistir sin demasiadas quejas ya que, o los propios empleados realizan las entregas, o contratan servicios de delivery (también PyMEs) que realizan sus servicios sin problemas. 

Una de las cadenas que está recibiendo una lluvia de quejas en la Defensa de las y los consumidores, como también en sus propias redes sociales, es Falabella. Compradores denuncian que «se sienten estafados» por el trato recibido ya que no les atienden los teléfonos, sus compras llevan más de 20 días de demora y algunos indican que en la página de seguimiento de su pedido les aparece que este ya fue entregado, cuando en realidad no es así. 

En la plataforma tuQuejaSuma, en la cual uno puede publicar un reclamo y desde allí tratan de contactarse con la empresa para encontrar una solución, Falabella no para de recibir comentarios negativos sobre sus operaciones.

No solamente en esta plataforma los usuarios tratan de encontrar soluciones, sino que también les dejan comentarios en las diversas cuentas de las redes sociales de Falabella. En Twitter, por ejemplo, la empresa no publica desde el 08/05 pasado y acumulan más de 700 mensajes de quejas por el servicio. 

Se ha realizado en Change.org una petición para juntar firmas contra esta cadena.»Falabella estuvo tomando órdenes sin realizar los envíos, cobrando la compra sin entregar», es el título. Ya recolectó 2500 firmas. 

«Algunos ya están pagando la cuota de un producto que no recibieron, no dan respuestas, no atienden los teléfonos, en la web no actualizan el estado del envío, el asistente virtual no sirve de nada, es imposible contactarse con alguien. Por Facebook lo único que hacen es mandar mensajes diciendo que lamentan las molestias, pero sin aportar ninguna novedad respecto al envío. ¿Cómo puede ser que se manejen de esta forma? ¿Qué va a pasar con los envíos? Cuando se reactive la cuarentena, ¿Cómo se van a evitar conglomeraciones de gente con la cantidad de clientes estafados que hay? Algún organismo debería hacer algo, somos muchos los que estamos en esta situación. Espero que esto sirva de algo y mueva un poco«, dice la petición, que se puede firmar aquí.

El 29 de mayo pasado, la cuenta de Defensa de las y los consumidores informó que «tras las denuncias recibidas, se imputó a las empresas Musimundo, Falabella, Garbarino, Cetrogar, Netshoes y MercadoLibre; y a los supermercados Disco, Vea, Jumbo, Walmart y Coto, por presuntos incumplimientos en los plazos de entregas de sus ventas online«.

«La Ley de Defensa del Consumidor (Ley 24.240) establece que informar un plazo de entrega cierto es una obligación para todos los proveedores, incluso durante la cuarentena, y las leyendas o cláusulas que adviertan sobre posibles incumplimientos son abusivas y no están permitidas. En el marco de la emergencia sanitaria y el aislamiento social preventivo y obligatorio, estas conductas colocan a las y los consumidores en situaciones de mayor vulnerabilidad y los deja a merced de plazos de entrega indefinidos», informaron.