Recordar a nuestros seres queridos, una forma de tenerlos cerca una vez más

Muchas familias recuerdan a sus seres queridos en el Día de los Santos Difuntos. La pandemia obligó a repensar estos momentos y vivirlos sin temor

La mesa en un lugar destacado de la casa. Sobre el mantel se pueden ver una variedad de platos. Eran las comidas que a ellos les gustaba. En algunas familias, se acostumbra a colocar flores de colores y panes. En ese altar que cuida cada detalle con amor, con las fotos de los que se fueron pero dejaron sus enseñanzas. Los preparativos para recordar a los Santos Difuntos comienza varios días antes. Este año, recordar a los que partieron, en algunos casos en soledad, en medio de la pandemia generará emociones difíciles de superar.

La licenciada en Psicología y directora del Cepsi Salta, Carina Salas, advirtió, que los cambios que para despedir a un ser querido en pandemia cambiaron, como cambió casi todo. “Todo duelo tiene una dimensión social y una personal. En lo social aparecen los actos en los rituales vinculados, y son importantes para que las expresiones de dolor sean validadas. Ahora el apoyo social se dará en otras formas”, expresó la profesional. 

Katia Gibaja, de la Fundación Ecos de la Patria Grande, contó que las tradiciones andinas recordando a los muertos era una forma de recordar sus enseñanzas y rendirles honores. El mes de noviembre en quichua significa “AyamarkaKilla”, que quiere decir “Aya-cadaver”, “marka- espíritu”, “Killa-mes”. “Este mes está destinado a todos los que se van”, expresó Gibaja, que se trata de la comprensión de la vida después de la tierra, y por esos que se hacen con música, porque se despide a esos espíritus que crecieron tanto que se van de la tierra. 

Marcela Choque tiene 40 y junto a sus hermanas e hijos mantiene la tradición de colocar la mesa para las almas, como le enseñó su mamá. Elda, mamá de Marcela, aprendió esta costumbre de sus abuelos en Cachi y se los transmitió a sus hijos con una seguridad que no deja espacio a la duda, de que el 2 de noviembre, los familiares difuntos pasan visitando los lugares donde fueron felices. “Mi mamá nos decía que había que esperar a los familiares con la mesa puesta porque tendrían permiso de venir”, recordó Marcela que ahora recuerda a su madre en esa mesa. El domingo, desde la mañana, Marcela y su familia pasaron el día cocinando todo lo que a Elda y al resto de sus familiares fallecidos les gustaba. “Empanadillas, rosquetes, bollos, panes con formitas, mate cebado, gaseosa”, enumeró.

Algunas familias acostumbran también colocar flores de papel, en el altar improvisado. “Pero las flores son para lo que llaman “almas nuevas”, son aquellos que cumplen su primer año de fallecidos”, explicó Marcela, que agregó que hoy, después del medio día se levanta esa mesa, luego de compartir en familia. Además todo aquello que quedó se entierra en un pozo que se hace en algún sitio de la casa. Porque todo regresa a su origen, la tierra.

Otro costumbre para llegar al día de los Santos Difuntos es hacer una novena, igual que visitar el cementerio. No hay que olvidar iluminar la mesa de los difuntos toda la noche. Recordarlos y una vez más sentirlos cerca, a través de la memoria.