Garro consolidó el liderazgo ideal
Si hay un gran ganador en la ciudad de La Plata luego de las elecciones del domingo es el intendente Julio Garro. La nómina que encabezaba Diego Santilli arrancó pasando una fuerte tormenta, el alcalde se cargó en sus hombros la campaña y sus candidatos se impusieron por más de 20 puntos de diferencia a los radicales, y el espacio en general consiguió un 45%, o sea que dejó al Frente de Todos a más de 11 puntos por detrás. El gran elector para el 2023 es el alcalde
Si hay alguien que sabe de desafíos complicados en la política platense es el intendente Julio Garro. Siempre sale de atrás y termina imponiendo su criterio con absoluta contundencia. Pero la elección de este domingo fue superior, incluso, a la de hace un año y medio cuando consagró su reelección.
El 11 de agosto el autor de esta columna publicó un tuit anticipando que se podía dar en La Plata un cuadro en las PASO de Juntos en donde Diego Santilli consiguiera 65% de los voto y Facundo Manes el 35%.
Con el 96.91% de los votos escrutados en el recuento provisional el conductor de la “Santilleta” anotaba 60.18% y el neurocientífico 39.81% en la Ciudad, e incluso en la tira de concejales, los “garristas” estiraban la diferencia al aportar un 61.55% contra los 38.44% de los radicales y “monzonistas”. “¿De donde sacaste esos datos?”, preguntó una altísima fuente municipal, y la respuesta fue: “solo olfato y un poco de camino electoral recorrido (es que a veces la experiencia le gana a la técnica)”.
En ese momento las encuestas conocidas localmente marcaban una diferencia de más de seis puntos de Manes sobre Santilli, e incluso los comentarios en los pasillos anticipaban que los radicales con su candidato se imponían a los postulantes del alcalde.
En la elección de ayer, el oficialismo garrista arrasó en los barrios y le ganó a su adversario directo en las PASO en los lugares en donde aparecía fuere en la previa: la zona norte del Casco Urbano.
Hubo una serie de aciertos de Garro, en especial el hacer plebiscitar la gestión, pero además un correcto armado político más abierto que en épocas anteriores incorporando prolijamente al Partido Socialista, con el ex concejal Emiliano Fernández, también al Partido Gen, presidido por el concejal Gastón Crespo, y como si fuese poco en los últimos 15 días avanzó incorporando a “garristas radicales” mediante la agrupación Usina Radical, que tienen entre sus armadores visibles al ex presidente del Comité de la Sección Novena de la UCR, Claudio Nuccitelli. Antes había sumado a una agrupación de fuerte presencia en barrios del oeste del distrito llamada Vecinos Unidos, que integran conocidos peronistas, radicales e independientes. El alcalde estaba decidido a ganar, pero no a anotar un simple triunfo sino que quería uno histórico, el más contundente de todos.
A todo esto, el “garrismo” histórico de los barrios, aquel que reúne peronistas tradicionales del distrito seguía avanzando, y aseguraban que “en estos lugares estamos muy bien, pero tan bien que le vamos a ganar por más margen que en la anterior al Frente de Todos”. Y los “paladares negros” del Caso Urbano sonreían: “metemos mesas y la gente viene a pedirnos boletas, hacemos casa por casa y los vecinos se quedan hablando largo rato”.
Esa crónica es lo que fue pasando. Ni una palabra puesta de más. Así, como esas historias, se cuentan de a decenas.
Hay quienes dicen que los radicales tuvieron un error de diagnóstico, y otros que hicieron muy mal las cuentas, pensando que lograban un triunfo y esos los ubicaba en condiciones de quedarse con la candidatura a la intendencia en 2023. Todo les salió mal. Incluso entre sábado por la noche y domingo durante gran parte del día se registraron fuertes discusiones internas por una fiscalización pobre.
Pero para saber por qué triunfó Garro de modo contundente hay que usar el retrovisor y mirar seis años atrás en donde la Ciudad se inundaba, y luego vinieron las obras para dar tranquilidad a los vecinos; cuando había cientos y hasta miles de cooperativistas humillados, y ahora empezaron a tener dignidad con un trabajo formal o en proceso de formalidad.
Pero no es eso nada más, sino que también se sufría el no poder construir por el sobreprecio existente de más del 30%, por prácticas mafiosas, por irregularidades en el planeamiento.
A eso se anotó el SAME con ambulancias que llegan en tiempo justo para asistir a los vecinos. También están las escuelas que se refaccionan o se hacen de cero con un Fondo Educativo que antes se usaba para hacer recitales y ahora para tener mejor servicio educativo. O la recuperación de la República de los Niños (antes era una unidad básica) y del brillante Teatro del Bosque “Martin Fierro” (lo había ganado la desolación). O porque ahora por primera vez hay una política turística, y hasta hay una línea directa entre la Comuna y el esquema comercial y productivo que tanto sufrió.
Esas cuestiones colocadas en la balanza fueron decisivas.
Ahora, seguramente este lunes el jefe comunal cargará a todos los heridos en su ambulancia política para gritar por la unidad y mirar las elecciones de noviembre en donde posiblemente acaricie un 55% de los votos, un porcentaje muy posible que le dará más soltura para armar el 2023 a su imagen y semejanza. Se jugó mucho ayer, y se juega mucho en noviembre en términos políticos
Garro mira la Provincia porque salió de una difícil y consiguió un triunfo amplísimo, pero además mira la Ciudad porque lo que siga al 2023 va a tener su sello propio, ¿o a esta altura a alguien le queda alguna duda?.
Con el resultado de ayer, si se repite en el mes de noviembre o incluso se amplía, Juntos conseguirá cuatro de las seis bancas de diputados en disputa y el Frente de Todos dos; mientras que en el Concejo Deliberante, Juntos conseguirá ocho bancas y el Frente de Todos las cuatro restante.
Frente de Todos
Con casi el 33%, el Frente de Todos termina haciendo una elección para el olvido. La disputa local hizo que para concejales Luis Arias, con todo el aparato nacional y provincial detrás consiga un 62.78%, mientras que el diputado Guillermo Escudero, encabezando la tira de concejales, sorprendió con más del 37% de los sufragios alcanzando una muy digna representación por la minoría.
Seguramente en el Frente de Todos se abrirá un nuevo fuerte debate interno, en donde tendrán que ver cómo entre las elecciones de hace un año y medio y las presentes están perdiendo entre 8 y 10 puntos.
Liberales con Píparo, otros grandes derrotados
En la línea de una muy mala elección se anota el economista José Luis Espert en donde en La Plata apenas pasó el 4% de los votos, y allí se vio el contundente fracaso de la postulación de Carolina Píparo, quien a horas de cerrase las listas dejó Juntos para plegarse al economista.
Los de Randazzo lejos de los pisos
El espacio del ex ministro del Interior, Florencio Randazzo, a pesar de tener tres nóminas locales está haciendo una elección similar a los liberales de Espert, lo que significa que está lejísimos de intentar acceder a tener representatividad en el Concejo Deliberante.
La izquiera es la tercera fuerza
Muy lejos de la pelea central, el Frente de Izquierda y de Trabajadores – Unidad, estaba alcanzando algo más de 6% lo que significa que está a algo más de dos puntos de poder intentar representación en el
Concejo Deliberante.
Según los datos oficiales esas son las únicas fuerzas que pasaron el 1.5% de los votos y estarán en posibilidad de competir en noviembre.