Massa basa su campaña para el balotaje en «ampliar la coalición»
Con la economía congelada y el peronismo movilizado, Sergio Massa apela al electorado independiente y cuenta los porotos propios y ajenos.
El ministro de Economía y candidato a presidente del oficialismo, Sergio Massa, celebra en voz baja el caos en que quedaron envueltas las dos principales alianzas de la oposición y ahora se concentra en buscar el voto independiente, de clase media, que quedó desencantado por el pacto entre Mauricio Macri, Patricia Bullrich y Javier Milei.
Se lo ve contento, ante sus más cercanos colaboradores, pero también ante sus interlocutores de los últimos días como gobernadores, intendentes, empresarios.
Massa está confiado en ganarle a Milei en el balotaje, pero evita decirlo públicamente porque sabe que todavía faltan tres largas semanas de campaña y de un escenario político y económico muy volátil.
Cree que, poco a poco, las fuerzas centrífugas de la sociedad orienten a los indecisos y a buena parte de los radicales, peronistas, no kirchneristas y hasta votantes de centro moderado del PRO, entre ellos Pymes y comerciantes que sufren la volatilidad del dólar, la escalada de precios y la inseguridad, hacia la boleta celeste y blanca de Unión por la Patria.
La pelea central del oficialismo ahora será contra el abstencionismo, cuando los argentinos vayan a votar el 19 de noviembre, en medio de un fin de semana largo por el feriado del lunes 20 de noviembre.
«El miedo a Milei fue más fuerte», celebran por lo bajo en el búnker de UP, pero con cautela, porque saben que cualquier episodio impredecible, puede dar vuelta otra vez la elección.
La semana post elecciones generales terminó siendo un hervidero con reposicionamientos políticos de los sectores que quedaron afuera del balotaje.
Frente a eso, en el búnker de Unión por la Patria apostaron a que el conflicto entre radicales y sectores del PRO, termine dividiendo las aguas y que ante «la confusión» opositora, la gente indecisa termine dándole su apoyo. «Es el candidato más democrático y capaz de ordenar el escenario económico», plantean, pese a que es el ministro de Economía del mayor índice de inflación en los últimos 30 años.
Massa logró despegarse del fracaso de la gestión de Alberto Fernández y de Cristina Kirchner. Según analizan en su entorno, eso quedó demostrado en las elecciones del domingo 22 de octubre, cuando dio vuelta la derrota en las PASO y se impuso por más de 6 puntos sobre Milei, que había sido el más votado el 13 de agosto.
También pudo despegarse de las denuncias de corrupción contra el kirchnerismo: por ejemplo, el terremoto Insaurralde, tuvo escasos efectos en su propio territorio, Lomas de Zamora y en el resto de los municipios bonaerenses donde volvió a imponerse mayoritariamente el peronismo.