«Está terminado el trabajo ‘sucio’ de las indagatorias
El polémico juez habló por primera vez de la llamada «causa de los cuadernos» y se refirió así a las declaraciones de los «arrepentidos». Esquivó preguntas sobre el impacto de las acusaciones que pesan sobre el fiscal Stornelli a partir del escándalo de espionaje que lo tiene bajo la lupa.
El juez federal Claudio Bonadio rompió el silencio. El polémico magistrado utiilzó una curiosa frase para referirse a los testimonios de los «arrepentidos» que declararon en la causa judicial contra funcionarios de la ex presidenta Cristina Kirchner, al señalar que «está terminado el trabajo ‘sucio’ de las llamadas a indagatoria».
En una entrevista con el diario Perfil, el magistrado fue consultado sobre el plazo para elevar a juicio oral el primer tramo de la causa y afirmó: «Es imposible fijarme una fecha. Porque ahora está terminado el trabajo sucio (dibuja comillas con sus dedos) de las llamadas a indagatorias. Falta hacer algunas resoluciones, y después dependo de la Cámara Federal y las Cámaras no tienen plazo, con lo cual no lo puedo calcular».
Al ser consultado sobre los cuestionamientos del abogado Carlos Beraldi, defensor de la ex jefa de Estado, por no tener registros audiovisuales de las audiencias con los «arrepentidos», Bonadio señaló que «no» es obligatorio y que, además, «el que tendría que haber dado los medios» para ello «es el procurador general de la Nación». En este sentido, agregó que «la Ley de Flagrancia establece que la audiencia tiene que ser filmada» pero que en este caso «no hay flagrancia».
Sin embargo, el magistrado se negó a hablar sobre otras cuestiones, como la acusación de Cristina Kirchner de que él tiene «ensañamiento» y que lleva adelante una «persecución» sobre ella.
También evitó opinar el posible impacto en la causa a partir de las sospechas que pesan sobre el fiscal Carlos Stornelli por su vínculo con el falso abogado Marcelo D’Alessio: «No hablo de eso». Al día siguiente de la entrevista, rechazó la recusación contra el fiscal presentada por la defensa del ex secretario del Ministerio de Planificación Roberto Baratta.
Por otra parte, negó que hayan existido presiones sobre los empresarios que se presentaron a declarar bajo la figura del imputado colaborador: «El fiscal lo puede guinar, pero después el tipo viene con sus abogados, delante del fiscal, delante de su defensa, y me dice ‘yo esto lo dicté por mi propia voluntad, libremente’. Usted, a su abogado, lo eligió usted o bajo presiones o sugerencia de alguien? ‘No, lo elegí yo'».