Amplían licencias para alentar el trabajo en casa
En el marco de las medidas dispuestas por la llegada del coronavirus, el gobierno dispuso extender las licencias a estatales y privados para casos especiales. Para el jueves el Presidente convocó a la oposición.
En otro día frenético de reuniones, negociaciones y discusiones sobre cómo enfrentar el avance de la pandemia del coronavirus en Argentina, el gobierno decidió ampliar las licencias para alentar el trabajo remoto desde la propia casa, esta vez, para trabajadores estatales que tengan hijos en edad escolar y sugerir a los privados que otorguen dispensas similares para que los empleados puedan cumplir labores desde sus domicilios, al tiempo que se decidió convocar para este jueves a dirigentes de la oposición a Casa Rosada para escuchar sus propuestas: todo sirve para intentar bajar la posibilidad de contagios por aglomeraciones.
Hoy, en tanto, se podrían comunicar cambios en las frecuencias del sistema de transporte de pasajeros.
Tras las reuniones interministeriales de los últimos días, con la presencia de expertos y científicos, ayer fue el turno de los popes del Ejecutivo para diseñar un plan de contención al avance de la enfermedad. Con la suspensión de las clases hasta el 31 de marzo, bien entrada la mañana el titular de Educación, Nicolás Trotta, anunció la creación del portal «seguimoseducando.gob.ar» que incluye programación audiovisual que sirva como entretenimiento y también herramienta de conocimiento para los alumnos en situación de aislamiento.
Durante la jornada de ayer este diario pudo confirmar que el presidente Alberto Fernández decidió convocar a dirigentes de la oposición para este jueves, para escuchar de sus bocas propuestas para transitar la emergencia y evitar que el país agudice su recesión económica. Hace unos días los radicales Mario Negri y Alfredo Cornejo habían ofrecido a los expertos en medicina y economía de la UCR para que pudieran realizar aportes al Ejecutivo.
Por la tarde sorprendió la convocatoria a medios e instituciones para difundir consejos y capacitaciones para los más chicos. Y, entre los asistentes, estuvo el ex titular de la Cámara de Diputados y hoy dueño de una empresa de televisión por cable, Alberto Pierri.
También por esas horas el ministro del Interior, Wado de Pedro, fiscalizó los controles que lleva adelante la Dirección Nacional de Migraciones en hoteles y alojamientos de distintos lugares del territorio nacional con el fin de verificar el cumplimiento del DNU que estableció el aislamiento obligatorio para personas que hayan ingresado al país desde el 27 de febrero desde las zonas «calientes» tras la declaración de pandemia por el Covid-19 de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Ayer se agregó al listado de países con circulación persistente del virus a Brasil y Chile, por lo que de acá a las próximas semanas se restringirá aun más el intercambio entre nuestro país y aquellas naciones.
Se hicieron esperar los anuncios de mayores restricciones a la circulación y a la concurrencia a los lugares de trabajo para cumplir con el mandato de aislamiento social a fin de evitar la propagación de los contagios. Sin una declaración de cuarentena generalizada, recién hoy se anunciarían cambios en la frecuencia del transporte público de pasajeros.
Recién a las 20.30 de ayer el ministro de Trabajo, Claudio Moroni, y la secretaria de Empleo, Ana Castellani, realizaron una declaración conjunta -sin preguntas- a la prensa acreditada para dar cuenta de las disposiciones que seguramente hoy se publicarán en el Boletín Oficial. Confirmaron las licencias para trabajadores estatales, de áreas no esenciales, de más de 60 años con enfermedades de base que pudieran complicar su estado en caso de caer enfermos por el Covid 19. También habrá licencia para estatales que tengan hijos en edad escolar mientras dure la suspensión del dictado de clases. Y se invitó a los empresarios a desalentar el trabajo en las oficinas para que se vayan disminuyendo las dotaciones y así se promueva el «home office», es decir, el trabajo desde casa.
En paralelo a la declaración a la prensa de los funcionarios, Alberto Fernández y el secretario de Asuntos Estratégicos, Gustavo Beliz, pasaron por la capilla de planta baja para dedicar un rezo a la imagen del Cura Brochero, que cumplía su festejo patronal. Y sí, para atravesar esta crisis, el jefe de Estado no duda en recurrir a fe religiosa. Como lo haría cualquier ciudadano de a pie.