El Gobierno negó que hayan refugiados bolsonaristas en el país

La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, aseguró que ni la Policía Federal brasileña ni Interpol les dio información al respecto. “Una cosa es que Brasil pida la extradición y otra que tengan un proceso o una condena para solicitarla”, agregó

La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, negó hoy que hayan recibido “algún tipo de requerimiento” para investigar la presunta llegada de refugiados bolsonaristas al país, en el marco de las investigaciones que lleva adelante la Policía Federal de Brasil acerca de la fuga de varios ciudadanos hacia Argentina, quienes habrían estado involucrados en el ataque del 8 de enero de 2023 al Palacio de Planalto, la sede de la presidencia de Brasil. Aquel ataque fue denunciado como un intento de golpe de Estado contra el, por entonces, presidente electo Luiz Inácio Lula da Silva.

Bullrich sostuvo en declaraciones al programa Sábado tempranísimo en Radio Mitre que “no hay alertas rojas sobre estas personas” y aclaró que “una cosa es que Brasil las pida y otra que tengan un proceso o una condena para solicitar una extradición”.

“Para eso debe haber pedidos oficiales de Cancillería de Brasil o pasar por Interpol para que tenga un marco legal”, agregó Bullrich, quien insistió con que no hay pedidos al Gobierno argentino.

El medio brasileño O’ Globo informó que al menos son 65 los implicados que habrían cruzado la frontera argentina, en el marco del megaoperativo Lesa Patria que lanzó la Policía de Brasil con el que busca capturar a 208 personas condenadas o investigadas por su participación en los atentados.

Según fuentes locales, ocho podrían pedir asilo político al Gobierno de Javier Milei por su estrecha relación con elexpresidente Jair Bolsonaro.

Los prófugos habrían atravesado la frontera argentina por diversos medios: a pie, escondidos en baúles de vehículos particulares o por el río Paraná. “Estamos trabajando en el control de los pasos fronterizos como Puerto Iguazú o el Cristo Redentor, en relación a prevenir cualquier ataque terrorista en la zona”, agregó la ministra.

En el contexto del operativo, las autoridades consiguieron capturar a 49 de los buscados en 18 estados brasileños. La periodista Bela Megale informó que el gobierno de Lula da Silva facilitará estos datos al Supremo Tribunal Federal (STF) para que emita las correspondientes órdenes de extradición, tarea que recaerá en el Departamento de Recuperación de Activos y Cooperación Jurídica Internacional (DRCI), vinculado al Ministerio de Justicia.

El fiscal general de la República, Paulo Gonet, solicitó en mayo al portal UOL que los prófugos fueran incluidos en la notificación roja de Interpol. La asociación de víctimas y familiares del 8 de enero (ASFAV) y varios diputados brasileños como Julia Zanatta y Marcel Van Hattem participaron en eventos en Argentina, denunciando la “dictadura” de Lula y apoyando la idea de una amnistía para los manifestantes detenidos.

La defensa a la gestión de Sandra Pettovello

Bullrich también hizo mención a la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, en relación a la causa alimentos que derivó con la salida de Pablo de la Torre. “Yo lo respeto muchísimo pero no tengo por qué hablar con él, pero eso no significa que él no apoye a un gobierno al cual está alineado. Está encuadrado en la situación de cambio profundo de la Argentina”, sostuvo.

Y agregó acerca de la gestión en el Ministerio. “Aquí, frente a una decisión política, hay que demostrarle a la sociedad que hay que denunciar a una máquina de hacer dinero, explotar a la gente, estimular una situación de esclavización moderna. Hubo una embestida de los mismos movimientos que cuentan con determinado apoyo político, la mayoría de los alimentos no estaban vencidos y habían fechas de un mes y medio en adelante”, expresó la ministra.

Además, apuntó hacia los movimientos sociales que radicaron la denuncia. “Si los alimentos hubiesen sido destinados hacia los más necesitados, hace 20 años no se los habrían robado. Durante dos décadas hay cientos de organizaciones que se los roban, ahora tenemos una red de facturas truchas manejadas por el señor Belliboni, con los lazos con grupos de lavados de dinero y organizaciones que lo hacían: ¿ahora se vienen a acordar que necesitan los alimentos?”, denunció.

Y afirmó que “les duele haberles pegado en el corazón de los problemas que tienen las organizaciones sociales, discriminación con respecto a quien comía y quien tenía plan y quien no, a mí no me engañan, ahora que no se vengan a hacerse los curas villeros cuando durante años los alimentos o más fueron a los bolsillos de las organizaciones”, cerró.