Kicillof enfrenta la falta de diálogo con Milei

A dos meses de la asunción de Javier Milei, la ausencia de diálogo con Axel Kicillof y la incertidumbre sobre los fondos para Buenos Aires marcan la agenda política. La Ley Ómnibus y la disminución de recursos coparticipables generan tensión y llevan al gobernador a buscar apoyo entre los gobernadores de Unión por la Patria para frenar aspectos perjudiciales.

Casi dos meses pasaron desde que Javier Milei asumió la presidencia, y la falta de diálogo entre su gobierno y el de Axel Kicillof se ha vuelto evidente. No solo persiste la ausencia de negociaciones entre ambos líderes políticos, sino que además, la incertidumbre en torno a los fondos que recibirá la provincia de Buenos Aires continúa, con una tendencia a la baja en los últimos dos meses.

El gobernador Kicillof, atento al desarrollo de la Ley Ómnibus, se encuentra en constante contacto con los gobernadores de Unión por la Patria, buscando apoyo para detener los aspectos más perjudiciales de la normativa. En una reciente conferencia, Kicillof expresó su preocupación, señalando que la ley no presenta ni un solo artículo que beneficie a la provincia. Además, criticó las políticas de La Libertad Avanza, argumentando que el ajuste aplicado por el gobierno nacional terminó perjudicando a trabajadores, jubilados y pequeños empresarios.

La Ley Ómnibus, aprobada en general el pasado viernes, volverá a debatirse en particular el martes. La tensión con el gobierno nacional se intensifica, especialmente por la propuesta de coparticipar el Impuesto PAIS para compensar las pérdidas por el impuesto a las Ganancias. Gobernadores aliados presionan por este debate, pero el Ejecutivo condiciona la discusión a la aprobación de la Ley Bases.

Kicillof y la Liga de Gobernadores de Unión por la Patria están fuera de la negociación directa pero mantienen contacto telefónico constante para presionar contra los artículos más controvertidos. La falta de diálogo directo entre Kicillof y el gobierno nacional es evidente, según fuentes de la Gobernación, y la preocupación central del mandatario es la reducción de fondos que Nación debe girar a la provincia

La merma en los recursos coparticipables en los primeros dos meses de la gestión libertaria ha afectado significativamente a Buenos Aires, siendo la provincia más perjudicada. Según el Instituto Argentino de Análisis Fiscal, los fondos recibidos por Buenos Aires disminuyeron un 13,5% en enero y un 11% en diciembre. Esta situación contrasta con la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, que resultó ser la menos afectada por la caída de recursos.

En este contexto, Kicillof no descarta recurrir a la Justicia una vez que la Ley Bases sea aprobada y reglamentada. La preocupación se centra en aspectos como las facultades delegadas y la privatización de empresas en el territorio bonaerense.

Mientras tanto, el gobernador continúa buscando apoyo y se reúne con distintos sectores productivos, subrayando su compromiso de defender la salud, la educación, el trabajo, la producción y el turismo en la provincia