La pobreza alcanzó al 32% de la población y afecta a 14 millones de personas

La pobreza y la indigencia crecieron en la Argentina a lo largo del segundo semestre del año pasado. Esta realidad es la que el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) dará a conocer el próximo jueves cuando publique su informe sobre «Incidencia de la pobreza y de la indigencia en 31 aglomerados urbanos».

La magnitud del crecimiento está en debate. El gobierno nacional ya abrió el paraguas. El presidente Mauricio Macri adelantó en su discurso de apertura de las sesiones ordinarias del Congreso, el 1 de marzo pasado, que «ha vuelto a los niveles de antes».

Los niveles de antes a los que hizo referencia el presidente son muy elevados. Luego del apagón informativo que aplicó en los primeros meses de 2016, el Indec informó que la pobreza había alcanzado al 32,2% de la población en el segundo trimestre de 2016. Esa sería la única información trimestral que proporcionaría el Indec ya que a partir de ese momento lo hizo de manera semestral.

A partir de este primer dato, las mediciones de la pobreza del Indec para los segundos semestres de cada año muestran una curva descendente: 30,3% de la población pobre en 2016; 25,7% en el mismo período de 2017.

Los datos del segundo semestre de 2018 mostrarán que la curva invertirá su sentido y dará un brusco giro ascendente.

Según Claudio Lozano, coordinador del Instituto de Pensamiento y Políticas Públicas (IPyPP), el nivel de pobreza del segundo semestre de 2018 se ubicará alrededor del 32% de la población. «Esto equivale decir que en 2018 se agregaron tres millones de personas en situación de pobreza», dijo.