Los precios mayoristas en 2019 aumentaron 58,5%
Los precios mayoristas subieron en diciembre 3,7%, por lo tanto, acumularon a lo largo del año pasado un avance de 58,5%, según indicó hoy el INDEC. El Índice de Precios Internos al por mayor (IPIM) señaló que la cifra final fue consecuencia del aumento anual del 55,6% en los productos primarios, del 60% en el precio de los artículos manufacturados y energía eléctrica y del 54,1% en los artículos importados.
La suba anual de los precios mayoristas se dio luego de que, en diciembre pasado, el indicador mostrara un alza del 3,7% respecto de noviembre último. El incremento del año se ubicó así en 4,7 puntos porcentuales por encima de la inflación anual de precios minoristas del 53,8%. En cuanto a los factores que generaron este fenómeno, se encuentra la suba de 4,1% en los productos nacionales, compensado parcialmente por la baja de 0,4% en los importados.
El nivel general del Índice de Precios Internos Básicos al por mayor (IPIB) mostró un aumento de 3,2% en diciembre por el aumento del 3,3% en los productos primarios y de 3,4% en los manufacturados y energía eléctrica. El INDEC difundió hoy que el IPIB anual tuvo un incremento del 58,1%, mientras que el IPP tuvo fluctuaciones durante todo el año pasado del 58%.
Si nos detenemos en los productos manufacturados, el Papel y productos de papel mostró un aumento de 80,3%, otros medios de transporte de 76,8% y prendas de materiales textiles con 68,3%. Los precios de la energía eléctrica también siguieron esta tendencia, crecieron un 46% en todo el año anterior y, entre los productos primarios, los agropecuarios aumentaron un 72%; el petróleo crudo y gas un 43,1%; y los productos minerales no metalíferos un 42,3%.
El 2019 se caracterizó por el incremento vertiginoso del costo de vida para los ciudadanos argentinos. La inflación además le pegó fuertemente a la industria y el dato proporcionado por el INDEC sobre el Índice de Precios Internos Básicos al por mayor demuestra esta problemática. El 2020 comienza con una economía estancada y con una fuerte recesión, el Gobierno de Alberto Fernández busca revertir esta tendencia, pero primero está ocupándose de cubrir las necesidades básicas de los sectores más vulnerables.