Luis Caputo: «Estamos negociando un nuevo acuerdo con el FMI»

El ministro de Economía, Luis Caputo, expone en un encuentro organizado por la Fundación Mediterránea.

“Recién estamos comenzando a hablar sobre un nuevo programa con el Fondo Monetario Internacional”, anticipó el ministro de Economía, Luis Toto Caputo. Al tiempo que aclaraba que será un proceso largo porque el Fondo no ve razones de urgencia para atender las necesidades del país.

“Este mes la inflación núcleo va a sorprender a más de uno”; “la recuperación de los salarios es clave, ya está empezando y claramente se va a continuar a lo largo del año”; “vamos a convivir con un tipo de cambio real más apreciado” y “cada peso que tenga de superávit se los vamos a devolver a ustedes con baja de impuestos”. Estas fueron algunas de las definiciones del ministro de Economía, Luis Caputo, en una exposición ofrecida este lunes por invitación de la Fundación Mediterránea.

Tras señalar que “íbamos hacia una hiperinflación garantizada, una crisis terminal”, el titular del Palacio de Hacienda sostuvo que “vamos a un dígito de inflación” y que “lo más importante es garantizar esta estabilidad”.

Reiteró que la vocación del gobierno es no resignar las anclas (fiscal, cambiaria y monetaria) y consideró que “la sorpresa no son los resultados, la sorpresa es que Argentina finalmente haya hecho lo que tenía que hacer, que tengamos un presidente que dijo pongamos esto en orden”, para luego pasar a ponderar “el coraje para llevar a cabo estas políticas” que tiene Javier Milei.

Recuperación

Consultado sobre las perspectivas en materia de actividad económica, se mostró optimista y señaló que el salario ya se está recuperando desde febrero como así también las jubilaciones. “El salario privado registrado subió en febrero 14.1% versus una inflación del 13,2”, aseveró el funcionario.

Pero agregó que “también la recuperación depende de cuán exitosos seamos nosotros en convencerlos a ustedes (los empresarios)”. En este sentido reflexionó que cambiaron los hechos, a partir del superávit fiscal y en la cuenta corriente, pero “no las expectativas”.

Al respecto sostuvo que “es un momento para ponerse muy positivo porque la sociedad también está aguantando”, en circunstancias en que “estamos frente a un cambio mucho más profundo de lo que se hizo en el pasado”.

Se comprometió a que “si ustedes compran este cambio, no solo con el voto sino con acciones vamos a poder bajar impuestos…cada peso que tenga de superávit se los vamos a devolver a ustedes con baja de impuestos”.

El ministro también aclaró que si bien es importante la sanción de la ley bases por el soporte político que significa -algo que observan los inversores extranjeros -, “no es condición sine qua non para tengamos equilibrio fiscal”.

Consideró que la recuperación de los salarios es clave, que “ya está empezando y claramente se va a continuar a lo largo del año”, y agregó que “somos muy optimistas sobre el proceso de desinflación”. Lo fundamentó en que ya no hay un mega sobrante de pesos y en que hay un cambio en las expectativas de donde se detuvo la huida del peso.

Precios

Desde este punto de vista, estimó que “hoy en muchos sectores los precios en dólares y en pesos quedaron claramente desfasados y la gente no los convalida”. Sostuvo que algunos empresarios se están dando cuenta y que otros no tienen más remedio que bajar los precios porque tienen productos perecederos y dijo que en algunos casos se están retrotrayendo a los valores de diciembre pasado. Estamos en “un excelente momento para que haya una recuperación rápida si logramos convencer a los actores económicos”.

Si bien consideró que es entendible que haya empresarios que se nieguen a recortar los precios tras 100 años de economía inflacionaria, afirmó que hoy la situación es muy diferente porque no hay déficit fiscal, no hay un mega sobrante monetario, se están recomponiendo las reservas y se registra superávit en el intercambio comercial.

Así, adelantó que “la gente no va a convalidar” precios altos y pidió “un cambio cultural” ya que si los empresarios entienden este proceso “la economía se recuperaría mucho más rápido” porque podrían vender más con los precios adecuados.

Refutó las críticas en cuanto a que son “morenistas” (por el ex secretario de Comercio, Guillermo Moreno) o “kirchneristas” por la intervención que tuvieron en la medicina prepaga. Desde este punto de vista, sostuvo que no controlan precios, sino que “controlamos conductas” frente a una oferta que consideró cartelizada.

Préstamo hipotecario

Caputo consideró, asimismo, “espectacular” que empiecen a aparecer créditos hipotecarios a 20 y 30 años ya que son “un motor fundamental de la economía” dijo que le darán un empuje particular a este tipo de préstamos.

Anticipó que continuarán trabajando para que baje la inflación y de esta forma también se reduzca la tasa de interés. Estimó que es necesario que “los bancos vuelvan a trabajar como bancos” dejando de prestar al Estado para volver a otorgar crédito a la gente.

Cepo y devaluación

Refiriéndose al cepo, consideró que eventualmente se podría levantar hoy, pero sostuvo que “no vamos a correr ese riesgo porque no hay una certeza de que no va a ser sin ningún sofocón”.

Si bien consideró que una inyección de recursos podría adelantar este proceso, recordó que recién están comenzando a hablar sobre un nuevo programa con el Fondo Monetario Internacional y dijo que en la medida que el Banco Central sigue comprando reservas, es menor el incentivo del organismo para adelantar nuevos fondos.

Tras pronosticar que seguirá bajando el riesgo país, Caputo fue consultado sobre el dólar. “No nos ponemos una meta de tipo de cambio real, no nos parece una medida razonable”. Lo fundamentó señalando que son muchos los factores que inciden como la productividad, tanto local como en los Estados Unidos, o el precio de las materias primas, entre muchos otros. Señaló un trabajo del economista Fausto Spotorno que muestra que, en los últimos 120 años, a precios de hoy, el valor del dólar promedio es 880 pesos, pero con picos de 1.270 pesos en épocas de crisis y de 560 pesos en momentos en que había confianza. Por caso, dijo que el valor de la Convertibilidad era de 550 pesos, es decir la mitad de lo que cotiza hoy el contado con liquidación.

Tipo de cambio

El mensaje importante que dejó el ministro fue que “naturalmente vamos a convivir con un tipo de cambio real más apreciado” porque han cambiado las condiciones por los superávit fiscal y externo y que “esa apreciación vino más menos para quedarse”. Dijo que entendía que en la memoria de los argentinos subsista un tipo de cambio real que tiene que ser caro, pero afirmó que “no va a pasar eso”.

Por último, defendió el blanqueo que impulsa el Poder Ejecutivo y afirmó que lo importante es que la economía se remonetice, ya sea en pesos o en dólares, ya que da lo mismo porque van a circular ambas monedas. Ponderó también los cambios propuestos en bienes personales tanto por la baja de la alícuota como por la estabilidad fiscal contenida en el proyecto, de donde consideró que se trata de una “super oportunidad”.