No hay muertes en hospitales por el apagón
A pesar de que Juan Guaidó afirma que hay menos 17 muertos por la falta de energía eléctrica, sus contrincantes políticos niegan estas versiones
El ministro de Salud de Venezuela, Carlos Alvarado, negó que haya fallecimientos en hospitales a causa del apagón que se registra desde el jueves en el país y que según el jefe del Parlamento y autoproclamado presidente interino, Juan Guaidó, ha causado la muerte de al menos 17 personas.
«La derecha internacional esperaba y a pocos minutos de que ocurrió la falla eléctrica, ya anunciaban una cantidad de muertos que no ocurrieron ni van a ocurrir porque el pueblo venezolano y el gobierno revolucionario y el equipo de salud, están trabajando arduamente para garantizar la vida de todos«, dijo Alvarado.
Plan de contingencia en hospitales
El ministro, que ofreció estas declaraciones al canal estatal VTV, indicó que el Gobierno de Nicolás Maduro tiene activado un plan de contingencia para atender a todos los hospitales del país y que el 90 % de las plantas eléctricas de los centros de salud se encuentran en funcionamiento.
«Por esta razón no tuvimos consecuencias mayores en relación a lo que ocurrió el pasado jueves», agregó, al tiempo que detalló que las plantas eléctricas están funcionando para atender las áreas de mayor interés: «las emergencias, terapias intensivas y unidades de diálisis».
Las versiones de Guaidó
Estas declaraciones se producen luego de que Guaidó, reconocido como presidente interino por más de 50 naciones, señalara que son 17 los muertos en los hospitales a causa del apagón. «Hay 17 muertos confirmados, 15 de ellos en Maturín, pero producto de la falta de comunicación no hemos podido monitorear 17 de los 40 hospitales que normalmente se monitorean», dijo el líder opositor en una rueda de prensa en la sede del Parlamento de Venezuela.
Sin embargo, en redes sociales muchas personas reportan que los fallecidos pueden ser unos 40, muchos de ellos pacientes con tratamiento de diálisis. Venezuela sufre desde el pasado 7 de marzo un gran apagón en la mayoría de su territorio, incluida Caracas, con retornos cortos e intermitentes de energía. Según el Gobierno de Maduro, hubo un «sabotaje» en la principal hidroeléctrica del país, el Guri, y atribuye la responsabilidad a Estados Unidos.