¿Nuevo impuesto a los bancos?
En vísperas del nuevo inicio de sesiones ordinarios, el Presidente analiza las nuevas medidas y dará un diagnóstico más claro del estado del país.
En los días previos al discurso por la apertura del período de sesiones ordinarias correspondientes a este año, el gobierno de Alberto Fernández recuperó uno de los rasgos que había caracterizado al kirchnerismo en su paso anterior por la Casa Rosada: la capacidad de mantener entre cuatro paredes el secreto de un anuncio, una noticia o un plan hasta el momento en el que se decidiera sacarlo a la luz. A pocas horas de que el Presidente se pare frente a la Asamblea Legislativa, lo poco que se sabe con certeza sobre su mensaje son los detalles que él mismo eligió dar a conocer. Las sorpresas, para este mediodía, están, por lo tanto, garantizadas.
Será la segunda vez que Fernández enfrente a las dos cámaras del Congreso, reunidas para escucharlo. A diferencia de lo que sucedió el 10 de diciembre, cuando asumió la presidencia con un mensaje donde declaraba los principios de su gobierno y marcaba el rumbo, hoy pueden esperarse mayores precisiones. Las urgencias, en rasgos generales, son las mismas: la carga insostenible de la deuda externa, la necesidad acuciante de poner en marcha la economía real, la crisis del Poder Judicial y el sistema de inteligencia, la redistribución, progresiva y progresista, de los recursos que se generan en el país.
En aquella ocasión, todavía se desconocía el alcance real del daño que había dejado la administración Macri. Hoy, aunque quedan rincones del Estado a los que no llegó la luz, hay una mayor comprensión dónde estamos parados. Fernández comenzará su discurso con un diagnóstico completo de la situación, que intentará evitar el tono de reproche por la herencia recibida aunque no se ahorrarán críticas a quienes dejaron el poder el 10 de diciembre. Hay grietas que pueden cerrarse y otras que no; si quedaba alguna duda al respecto, quedó despejada la última semana, cuando empezaron a discutirse en serio algunos privilegios.