Para Marcos Peña está todo bien
Para Marcos Peña está todo bien: “El Gobierno fue votado para este proceso de cambio”
El jefe de gabinete expone en el Senado el primer informe de gestión del año. A pesar del descontrol económico y el dólar por las nubes, aseguró: “Tenemos claro que no hemos resuelto todos los problemas, pero tenemos la absoluta convicción de seguir en este camino de transformación”.
Un descontrol. El dólar cerró a $44,90 según el Banco Nación, las tasas de interés volvieron a subir y la canasta básica total alcanzó los $27.570 tras el aumento de 4,3 % en febrero. Pero en el Gobierno insisten en remarcar que “este es el camino”, y así lo dejó en claro el jefe de Gabinete durante su exposición en el Senado de la nación.
Para Marcos Peña “estamos sobre tierra más firme” si se compara la situación actual del país con la que había en diciembre de 2015 e insistió que el Gobierno está “poniendo las bases para salir del estancamiento de tantos años”.
Imposible de negar la realidad del aumento de la pobreza, que alcanza a más de 12.600.000 de personas en todo el país, Peña sostuvo que “las cifras son peores que hace un año y todavía son altas comparado a lo que tendríamos que estar” pero insistió: “La buena noticia es que esta vez estamos saliendo de esta crisis, resolviendo los problemas estructurales, y yendo al fondo de la cuestión”.
En otro pasaje de su discurso, Peña insitió con la necesidad de mejorar la “competitividad laboral”, el clásico eufemismo utilizado para atacar las condiciones de los trabajadores y dar grandes beneficios a los empresarios. “El Gobierno se puso como objetivo reducir los costos del empleo bajando la litigiosidad laboral, que encarece el empleo, a través de las alícuotas de las ART, al incluir cláusulas de productividad en los convenios colectivos y bajar los impuestos a los salarios más bajos”, dijo. Y dejó planteado que pretenden profundizar este camino: “En las tres cosas hemos avanzado, también en mesas de diálogo sectoriales y permanentes con las centrales sindicales.Esperamos seguir haciéndolo”.
La colaboración que han prestado las dirigencias sindicales no es un detalle menor. De hecho, el Gobierno viene de cerrar un acuerdo con la conducción de la CGT en el cual recibirá, $ 32 mil millones a cambio de una “conflictividad administrada y de baja intensidad”.
En otro tramo de su discurso, Peña se refirió a la «desconfianza» que existe en los mercados. «El mercado no duda de la capacidad de pago, duda de la voluntad de pago porque todavía hay sectores económicos que agitan soluciones mágicas que fracasaron. Eso nos aumenta el riesgo en un año electoral y hasta que la Argentina decida en octubre cuál es el camino a recorrer. Si quiere salir del pantano, de décadas donde siempre queremos ser los más vivos del barrio, con trampa o mentirle al mundo, donde ya no nos creen más».
Al finalizar su exposición y antes de abrir a las preguntas de los senadores, se refirió a la colaboración que el Gobierno ha recibido de parte de la cámara alta y que le permitió avanzar en las leyes de ajuste y entrega, aún siendo minoría: «Más allá de la retórica y los discursos, estoy seguro de que en muchas cosas pensamos igual. Preservemos estos ámbitos y construyamos juntos».