Pobreza que duele
Este lunes, el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) informó que el índice de pobreza aumentó a 35,4% al término del primer semestre este año, contra el 27,3% en igual período de 2018.
En tanto, el Nivel de Indigencia aumentó a 7,7% desde el 4,9% anterior de finales de 2017, informó el organismo.
Estos niveles registrados en el primer semestre del año estuvieron incluso por sobre los del segundo semestre del año pasado, cuando el nivel de pobreza alcanzaba a 32% de las personas y el de la indigencia a 6,7%.
Con una población estimada en 45 millones de habitantes, la pobreza estaría afectando a 15,9 millones, entre los cuales se encuentran 3,4 millones de indigentes.
El Indec mide la pobreza a partir de la posibilidad que tiene una persona o un núcleo familiar de adquirir la cantidad mínima de alimentos, indumentaria y servicios que integran la Canasta Básica Total (CBT)
Esta Canasta, para una pareja con dos hijos de 6 y 8 años, alcanzó a junio del año pasado a $31.148,41 58,3% más que en igual mes de 2018.
En cuanto a la indigencia, se fija por la cantidad mínima de comida que requiere una persona o una familia para subsistir, y que a junio pasado estaba en $12.409,72 con un aumento de 53,5% internual.
En tanto, el Índice de Salarios, sean éstos registrados o no, indicativo del poder de compra de los trabajadores para adquirir esa Canasta, aumentó 36,4% interanual.
Este incremento en el índice de Pobreza e Indigencia se dio en el contexto de un año en el que la economía cayó 2,5%, la desocupación subió a 10,6% desde el 9,1% y la inflación alcanzó a 55,8%, según los datos del propio Indec.
Entre las ciudades con mayor nivel de pobreza se encontraron Concordia, con 52,9%; Resistencia, 46,9%; Santiago del Estero, 44,8%; Salta y Corrientes, 41%; Formosa, Tucumán y Catamarca, 40%; y Posadas y el Gran Buenos Aires, 39,8%, entre otras.
Este nivel de pobreza de 35,4% es la más alto del gobierno del Presidente Mauricio Macri, quien asumió a fines de 2015 con una pobreza de 29%, según las mediciones alternativas, como la que hacía la Universidad Católica Argentina, ya que no había registros oficiales.
Antes de que se dieran a conocer las cifras, el mandatario había adelantado que “en unas horas, el Indec va a dar a conocer el último índice de pobreza que, lamentablemente, va a reflejar la difícil situación por la que atravesamos».
El viernes pasado, el ministro de Hacienda, Hernán Lacunza, apuntó a la necesidad de alcanzar consensos entre las principales fuerzas políticas para definir acciones que se mantengan en el tiempo, para sacar al país de su estancamiento.
“No se puede resetear la Argentina cada cuatro años” cuando hay elecciones sino que hay que tener “un conjunto de políticas y cosas que no se rediscutan, como pasa en países vecinos, y que se traduce en un crecimiento sostenido y reducción de la pobreza”, dijo Lacunza en el cierre de la 40ma. Reunión Anual del Instituto Argentino de Ejecutivos de Finanzas