Si gobernara el macrismo esto sería un desastre
El archivo los condena. Poco tiempo atrás la exgobernadora Vidal aseguró que no abriría hospitales nuevos en la provincia. Macri privilegió la especulación financiera antes que la salud y la alimentación. ¿Qué pasaría si aún fueran gobierno?
l Gobierno de Alberto Fernández le tocó lidiar con una situación casi sin precedentes. Ninguna pandemia en las ´últimas décadas desató el desastre que está produciendo en materia sanitaria, económica y social como el coronavirus.
Sin embargo, muchos se preguntan qué pasaría si aún gobernara el macrismo en Argentina. Pues bien, la respuesta está en el archivo.
Poco tiempo atrás, la exgobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal aseguraba que no iba a abrir hospitales nuevos. Esto pese a que el kirchnerismo dejó casi terminados varios nosocomios que quedaron abandonados durante los 4 años de gestión de Cambiemos.
La exreferente provincial del macrismo admitió en 2017 que en su gestión no abriría nuevos hospitales, luego de darse a conocer que el Gobierno paralizó y abandonó obras en siete centros médicos de alta complejidad que daría atención a un millón de personas.
«La salud no es un edificio, a mí no me interesa cortar cintas. Yo no vine a la gobernación para cortar cintas y decirle a la gente que tiene un hospital que después no tiene».
«Construir un edificio es la parte más fácil. Lo que vale la pena es poner equipamiento de última generación, que haya insumos, enfermeras y médicos. O seguridad. Y tecnología para que la gente sepa cuánto hay que esperar en una guardia», añadió la gobernadora.
Según un informe de Soberanía Sanitaria, el gobierno la administración Macri privó 30.700 internaciones, 14.300 partos, 8.730 cirugías y 1.693.000 consultas externa.
SALUD PARALIZADA. El estado de avance general de las obras de los Hospitales del Bicentenario. (Crédito: Fundación Soberanía Sanitaria)
Una publicación de Diario Pulse de la época advirtió que los hospitales de primera generación que funcionaban en forma parcial al abandonase la terminación del 10 por ciento restante o que directamente quedaron cerrados eran los hospitales del Bicentenario de Esteban Echeverría, Ituzaingó, Escobar y de Paraná, Entre Ríos.
Lo mismo ocurrió con los hospitales Samic (Servicio de Atención Médica Integral para la Comunidad) de Cañuelas, Gregorio de Laferrere y Rafael Castillo.
La gestión cambiemita redujo a su mínima expresión al Ministerio de Salud, convirtiéndolo en secretaría. Algo que, afortunadamente, el nuevo Gobierno del Frente de Todos revirtió y, sin esperarlo, permite un mejor abordaje al drama del COVID-19.
Ni hablar de la cuestión económica y social. La actual gestión está atacando con medidas paliativas todos los frentes y se prepara para una brutal caída de la economía. A las medidas ya anunciadas, que permite a trabajadores ausentarse de sus lugares de trabajo y en muchos casos trabajar desde sus casas, se sumarán las que se espera se anuncien hoy.
La cuestión sanitaria también sería un caos en materia de medicamentos. El macrismo redujo las vacunas gratuitas y los remedios a los jubilados. Algo que Alberto también revirtió con el nuevo programa que garantiza 170 remedios esenciales a la clase pasiva.
Otro capítulo es el de formadores de precios y de abastecimiento. El presidente fue claro, “becesitamos inyectar recursos para que la economía no se paralice y se siga moviendo. Eso complica la situación fiscal, pero esta vez lo importante no es el déficit. Hasta Merkel lo dijo» afirmó el Alberto. al tiempo que aseguró que perseguirá a quienes generen situaciones de zozobra con la especulación en materia de aumentos y faltante de mercadería.
No hay lugar para los vivos en la nueva Argentina. De todos depende cómo afrontemos esta situación que azota al mundo entero.