Victoria Villarruel tomó distancia del aumento en la dieta de los senadores
Tras esta suba, los senadores cobrarán por mes cerca de $8,3 millones en bruto. La reacción del presidente Javier Milei no se hizo esperar y consideró a la suba como “una traición al pueblo trabajador”
Luego de las críticas del presidente Javier Mileipor el aumento en la dieta de los senadores, Victoria Villarruel, titular del Senado, tomó distancia de la decisión que tomó el cuerpo legislativo. “Solo decido sobre las paritarias de los empleados”, aseguró.
En las últimas jornadas, las autoridades de ambas cámaras del Congreso replicaron el aumento que obtuvieron los empleados, otorgado por la administración nacional para julio y agosto, de 3,5% y 3%, respectivamente. De esta manera, los senadores cobrarán el mes próximo cerca de $8,3 millones en bruto, según documentos a los que accedió Infobae.
La medida fue fuertemente cuestionada por Milei, quien expresó su “máximo repudio” al aumento de las dietas. Frente a esto, la vicepresidenta intentó diferenciarse de la decisión de los legisladores y explicó que “es facultad de los senadores desengancharse o no de las paritarias de los trabajadores”. “Yo solo decido sobre las paritarias de los empleados”, afirmó.
El descargo del Presidente fue mucho más extenso. “¿Quién cobra 9 palos por mes? Nadie”, preguntó el mandatario a través de una publicación en su cuenta de X y sostuvo que “cobrar 9 millones de pesos en este contexto es más que una burla, es traición al pueblo trabajador”.
“Una vez más, la casta política se niega a soltar sus privilegios mientras el pueblo sufre las consecuencias. Repudio cada una de las firmas que dieron lugar a éste despilfarro a favor de los políticos y en contra de los argentinos”, enfatizó el libertario.
Pese a que evitó puntualizar en los responsables detrás de la medida, señaló: “No sé quién fue el responsable de semejante burla pero quienes han avalado estos atropellos a los trabajadores sufrirán las consecuencias en las urnas cuando el pueblo se exprese mediante el voto”.
Esta no es la primera vez que Victoria Villarruel se encuentra en medio del mismo debate, ya que en oportunidades anteriores defendió el hecho de que los legisladores tengan un ingreso que sea acorde a las tareas que ejercen como representantes del pueblo.
En abril de este año, los bloques acordaron un aumento de su salario que elevó su dieta a más de 4 millones por mes. En mayo, hicieron lo mismo y el monto ascendió a 7 millones.
Luego del primer incremento, Villarruel alegó que la suba “fue votada a mano alzada en el recinto por contar con los votos necesarios para hacerlo”.
“Como Presidente del Senado no soy senadora, no cobro del Senado y no puedo interferir en esas decisiones. Tampoco puedo obligar a que se vote nominalmente ni a que se justifique la decisión avalada por todos, porque no soy senadora”, se justificó.
En marzo, se desató por primera vez la polémica, cuando Martín Menem, titular de Diputados, y Villarruel habían convalidado un aumento del 16% a partir del 1° de enero de 2024, y del 12% más acumulativo desde el 1 de febrero. Sin embargo, tras el rechazo del Ejecutivo, ambos desactivaron la suba otorgada.
Si bien la dieta de los senadores y diputados estaba atada a la paritaria de los trabajadores del Congreso, eso se interrumpió en 2021, en medio de la pandemia y un contexto de descontento generalizado con la dirigencia de todos los partidos, con fuertes cuestionamientos a los gastos de “la política”. En aquel momento, las autoridades habían decidido “desenganchar” las dietas de los legisladores de los acuerdos salariales de los empleados.
En ese sentido, se firmó una resolución que estipulaba que cualquier aumento de los haberes de los legisladores debía ser “tratado y aprobado por el pleno de ambas Cámaras”. La estrategia buscaba contener el reclamo de incrementos, ya que los legisladores evitarían votarlo en el recinto para evitar las críticas públicas